¿Es saludable comer una gran cena antes de acostarse?
Según los estudios más recientes, el refrán de “desayuna como un rey, come como un príncipe y cena como un mendigo” ya no es tan claro como se pensaba antes, por lo que no se puede responder a la pregunta de si es malo comer mucho antes de dormir. Es verdad que una cena abundante puede hacer que la digestión sea más ardua y difícil, lo que dificulta el descanso. Sin embargo, depende de varios factores, como la dieta que se consume (si contiene una gran cantidad de proteínas o grasas, etc.). Además, no existe una respuesta universal porque dependerá de cada individuo, de sus ritmos biológicos y de lo que se conoce como crononutrición, que es el estudio de la alimentación basada en esos ritmos biológicos.
Algunas personas son vespertinas, mientras que otras son matutinas. Y eso significa que la respuesta a la pregunta depende del metabolismo y el proceso digestivo de cada persona. Cada vez es menos posible generalizar en el ámbito de la alimentación. Los estudios más recientes han demostrado que la teoría antigua de que cenar mucho conduce al aumento de peso es incorrecta. Un estudio reciente analizó la pérdida de peso en dos grupos: uno que desayunaba mucho y luego comía menos a lo largo del día, mientras que otro que desayunaba muy poco y comía más a lo largo del día, y cuya ingesta más importante era por la noche. El resultado fue que la pérdida de peso en ambos grupos era prácticamente igual. Eso demuestra que cuándo comer no es importante para perder peso. Parece que tiene un impacto en el apetito y la sensación de saciedad. Parece que un desayuno más abundante reduce las hormonas del apetito y aumenta las de la saciedad, en comparación con una cena más copiosa.
Pero ya estamos conscientes de que en nutrición es necesario recurrir a la personalización, ya que la respuesta metabólica y el ritmo de producción de hormonas varían entre individuos.
Por lo tanto, como respuesta a la pregunta, diré que no hay problema si la persona de la que nos hablas en tu email (que cena en abundancia) está bien antes de acostarse. Nos dices también que, justo antes de cenar, se dedica dos horas al gimnasio todos los días, lo que supone un gasto significativo de energía, por lo que necesita compensar ese gasto.
Se dice que el desayuno es la comida más importante del día. Sin embargo, el desayuno es solo una interrupción del ayuno. Y un desayuno abundante o no puede funcionar mejor para cada persona. Los ayunos intermitentes, en los que se cambian los horarios de ingesta, lo demuestran. Las normas generales que veníamos proponiendo ya no se aplican. Ahora sabemos que hay que hacer un estudio de cada persona y, en función de la respuesta que tenga, sus ritmos cronobiológicos, sus horarios y su estado emocional, la recomendación nutricional debe ser una u otra. Es mucho más difícil que sumar y restar calorías.
Además, tiene un impacto significativo en la capacidad de su sistema digestivo, si todavía está en proceso de crecimiento o si necesita más aporte. Según mi opinión, la afirmación radical de que es malo cenar en abundancia justo antes de acostarse es perjudicial y, dado el conocimiento actual de la nutrición, es inaceptable.