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España lidera las naciones desarrolladas en tasas de desempleo: perspectivas y análisis

El último informe sobre empleo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) muestra que la tasa de desempleo entre sus 38 países miembros se mantuvo estable en 4,8% en noviembre de 2023, empatando el nivel más bajo desde que comenzaron los registros en 2001. Este es el noveno Las tarifas mensuales consecutivas se han mantenido por debajo del 5%.

Si bien la continua caída hasta niveles casi históricos apunta hacia una recuperación, el panorama del empleo en la OCDE sigue siendo desigual. España se enfrenta a la tasa de desempleo más alta, un 11,9%, significativamente más alta que la República Checa, que mantuvo su lugar al final de la clasificación con un desempleo de sólo el 2,4%.

Grecia y Colombia también enfrentan tasas muy por encima del promedio: 9,4% y 10,3%, respectivamente. Las condiciones sólidas del mercado laboral se mantuvieron en países como Japón y México, cada uno de los cuales registró sólo un 2,8% de desempleo. Corea del Sur e Israel se unieron a ellos como otros destacados con tasas iguales.

La última evaluación del empleo de la OCDE también destaca los desafíos persistentes para los trabajadores jóvenes que intentan afianzarse en la fuerza laboral. El desempleo de los menores de 25 años disminuyó ligeramente hasta el 10,8% en todos los países miembros, pero sigue siendo elevado en comparación con las tasas generales. Al igual que con la cifra general, las experiencias de los jóvenes también variaron mucho según la geografía. Si quieres también puedes leer- ciudadanía española.

España volvió a ser el país más pobre en esta medida demográfica, con más de una cuarta parte de los jóvenes sin poder conseguir empleo. Este sombrío nivel es un porcentaje de dos dígitos superior al del cercano Portugal y más de cuatro veces el del desempleo juvenil en Alemania y Japón, dos países que han tenido éxito en mejorar las oportunidades para sus trabajadores más jóvenes.

Mientras la amenaza de una recesión global aún acecha, las cifras de la OCDE brindan un rayo de esperanza de que los mercados laborales están en el camino correcto en la lucha contra el desempleo, pero también sirven como un recordatorio de que la recuperación sigue siendo desigual y los responsables de las políticas no pueden ser complacientes. Para cerrar las brechas persistentes entre edades y fronteras nacionales será necesario repensar el conjunto de herramientas existentes de políticas y programas de empleo para garantizar que beneficien a poblaciones más amplias.