7 maneras en que el cambio climático afecta la agricultura de la República Dominicana
La agricultura dominicana enfrenta desafíos sin precedentes debido al cambio climático. Como nación insular del Caribe, República Dominicana depende enormemente de su sector agrícola para mantener su economía y alimentar a su población. Los cultivos como la caña de azúcar y el arroz forman la columna vertebral de la agricultura nacional, siendo exportaciones fundamentales para el país. Sin embargo, el cambio climático está transformando el panorama agrícola de manera dramática, amenazando tanto la seguridad alimentaria como la estabilidad económica.
El sector agrícola dominicano es especialmente vulnerable a las variaciones climáticas, particularmente en las regiones suroeste y noroeste del país, donde las sequías han tenido un impacto significativo en los rendimientos de cultivos. Además, el país es altamente vulnerable a eventos meteorológicos extremos como tormentas e inundaciones, que impactan directamente al sector agrícola. Esta vulnerabilidad se intensifica considerando que la agricultura emplea a una porción significativa de la población rural y juega un papel crucial en la seguridad alimentaria y los medios de vida de las comunidades rurales.
1. Sequías y Reducción de Precipitaciones
La disminución de las precipitaciones representa una de las amenazas más graves para la agricultura dominicana. Cuando llueve menos, aumentan las posibilidades de que los cultivos mueran, arruinando las cosechas y dañando el suelo. Esta situación es particularmente preocupante para los dos mayores productos de exportación del país: la caña de azúcar y el arroz.
El arroz, que se utiliza en el 90% de las comidas dominicanas, es uno de los pilares económicos principales del país. Con menos precipitaciones, la producción de arroz disminuye significativamente, lo que daña gravemente la economía nacional. Las proyecciones climáticas indican que las temperaturas probablemente aumentarán a 26.2°C para 2010, acompañadas de una reducción en las precipitaciones.
Impacto de la Sequía | Consecuencias |
Reducción de precipitaciones | Muerte de cultivos y daño al suelo |
Menor producción de arroz | Daño económico significativo |
Afectación de caña de azúcar | Pérdida de ingresos por exportación |
Ciclo hidrológico alterado | Menos agua para irrigación |
Las regiones suroeste y noroeste del país han experimentado sequías que han tenido un impacto considerable en los rendimientos agrícolas. Estos fenómenos afectan el ciclo hidrológico durante la estación seca, reduciendo el agua disponible para irrigación y acortando el período de crecimiento de los cultivos.
2. Inundaciones Extremas
Las inundaciones extremas han emergido como una amenaza devastadora para la agricultura dominicana. En junio de 2024, apenas unos días después del inicio de la temporada de huracanes, cientos de cultivos en diversas áreas fueron inundados debido a las fuertes lluvias. Un agricultor individual reportó pérdidas de al menos tres millones de pesos dominicanos, aproximadamente 50,000 dólares estadounidenses, solo en junio de 2024.
Las pérdidas económicas por inundaciones han sido astronómicas. Los informes del Ministerio de Agricultura indican que las pérdidas en el sector agrícola debido a las inundaciones causadas por el huracán Fiona en 2022 superaron los 1.6 mil millones de pesos dominicanos, aproximadamente 26 millones de dólares estadounidenses. Las pérdidas registradas en noviembre de 2023 resultaron en daños a los medios de vida agrícolas que superaron los 470 millones de pesos dominicanos, más de 7 millones de dólares estadounidenses.
Año | Evento | Pérdidas (Pesos Dominicanos) | Pérdidas (USD) |
2022 | Huracán Fiona | 1,600 millones | $26 millones |
2023 | Inundaciones noviembre | 470 millones | $7 millones |
2024 | Inundaciones junio | 3 millones (un agricultor) | $50,000 |
Daniel Valerio, especialista en cambio climático de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), explica que las inundaciones recientes han impactado directamente al sector agrícola, resultando en la pérdida de cultivos y cosechas, la pérdida de animales y su producción, y una reducción en los ingresos de los productores y sus familias.
3. Huracanes y Tormentas Tropicales
Los huracanes y tormentas tropicales representan una amenaza constante para la agricultura dominicana. Los riesgos climáticos afectan directamente la agricultura a través de factores como huracanes, inundaciones, deforestación, sequías y deslizamientos de tierra. Estos eventos disminuyen la productividad de semillas y mano de obra, crean desafíos en la exportación de productos, impactan el deterioro o bloqueo de carreteras, afectan la escasez de materias primas debido a inundaciones y erosión en áreas de extracción, y reducen la visibilidad impactando las operaciones de transporte y maquinaria.
El huracán Mitch destruyó un tercio del área de cultivo en República Dominicana, causando una pérdida valorada en 278 millones de dólares estadounidenses, y dañó aproximadamente el 20 por ciento de los cultivos. Este tipo de eventos climáticos extremos son particularmente devastadores porque pueden destruir infraestructura agrícola crítica en cuestión de horas.
Impactos de Huracanes | Efectos Específicos |
Destrucción de cultivos | Pérdida inmediata de producción |
Daño a infraestructura | Carreteras, sistemas de riego |
Escasez de materias primas | Interrupciones en la cadena de suministro |
Problemas de transporte | Dificultades para exportar productos |
Los ciclones, tormentas, inundaciones y sequías dañan regularmente los cultivos y la infraestructura en las cuencas hidrográficas del país. El cambio climático probablemente causará estrés adicional, ya que el aumento de las temperaturas y la disminución de las precipitaciones reducirán la disponibilidad de agua en un momento en que la demanda está aumentando debido al crecimiento poblacional.
4. Aumento de Temperaturas
El aumento de las temperaturas está alterando fundamentalmente los patrones de crecimiento agrícola en República Dominicana. Según los escenarios climáticos que utilizan modelos de circulación general, preparados para la Primera Comunicación Nacional, se espera que la temperatura aumente a 26.2°C para 2010. Este incremento térmico tiene consecuencias directas en la productividad agrícola.
La productividad de la agricultura puede disminuir entre el 12 y 50 por ciento debido al cambio climático. Por ejemplo, en Ecuador, las pérdidas de rendimiento para 2080 pueden alcanzar el 20 por ciento para cacao y café, y el 40 por ciento para banano y caña de azúcar. Aunque los rendimientos de maíz pueden permanecer sin cambios en Colombia, se predice que declinarán a casi cero en el Piedemonte venezolano.
Cultivo | Impacto Proyectado | Región de Referencia |
Cacao | -20% rendimiento | Ecuador (proyección 2080) |
Café | -20% rendimiento | Ecuador (proyección 2080) |
Banano | -40% rendimiento | Ecuador (proyección 2080) |
Caña de azúcar | -40% rendimiento | Ecuador (proyección 2080) |
La papa será vulnerable al calor que afecta el crecimiento de la planta y la iniciación de tubérculos, reduciendo así el rendimiento. Las temperaturas en aumento también afectarán negativamente el contenido de materia seca y la formación de almidón en este cultivo de tubérculo muy importante. El calentamiento de la temperatura y la humedad aumentará el tizón tardío, la plaga de papa más dañina, que puede expandirse por encima de los 3,000 metros donde está ausente hoy.
5. Estrés Hídrico y Escasez de Agua
La cuenca del Yaque del Sur en el suroeste de República Dominicana ya está bajo severo estrés hídrico. La población del área es mucho más pobre que el promedio nacional y depende de cultivos comerciales y agricultura de subsistencia. El cambio climático probablemente causará estrés adicional, ya que el aumento de las temperaturas y la disminución de las precipitaciones reducirán la disponibilidad de agua en un momento en que la demanda está aumentando debido al crecimiento poblacional.
La degradación creciente de la calidad del agua en los cuerpos de agua dominicanos, junto con la vida útil acortada de los embalses debido a la degradación de la tierra impulsada por prácticas agrícolas insostenibles, amenaza la seguridad alimentaria. Esta situación se verá exacerbada por los aumentos proyectados en las condiciones de sequía y estrés hídrico.
Indicador de Estrés Hídrico | Impacto |
Reducción de precipitaciones | Menos agua disponible para irrigación |
Degradación de calidad del agua | Amenaza a la seguridad alimentaria |
Vida útil reducida de embalses | Menor capacidad de almacenamiento |
Aumento de demanda poblacional | Mayor presión sobre recursos hídricos |
Como resultado del estudio de vulnerabilidad para recursos hídricos que muestra una disminución de la escorrentía para 2100 como resultado del aumento de temperaturas y disminución de precipitaciones en el país, se han identificado las siguientes medidas de adaptación: cambios en la capacidad de almacenamiento de agua, implementación de métodos para mayor ahorro de agua, cambios en sistemas de cultivo e implementación de prácticas de no labranza que requieren menos agua.
6. Degradación del Suelo y Erosión
La degradación del suelo y la erosión representan amenazas significativas amplificadas por el cambio climático. La falta de oxígeno en suelos inundados limita los procesos fisiológicos esenciales de los cultivos y, por lo tanto, aumenta la cantidad de elementos dañinos, causando pérdidas en poco tiempo. Este proceso se ve acelerado por eventos climáticos extremos que eliminan la capa superficial del suelo y reducen su fertilidad.
Los agricultores familiares son los más afectados debido a su alto grado de vulnerabilidad y capacidad limitada para prepararse y responder efectivamente a estos eventos extremos. La erosión del suelo no solo reduce la productividad inmediata, sino que también compromete la capacidad productiva a largo plazo de las tierras agrícolas.
Tipo de Degradación | Causa Principal | Impacto a Largo Plazo |
Erosión superficial | Lluvias intensas | Pérdida de fertilidad |
Compactación | Inundaciones prolongadas | Reducción de aireación |
Salinización | Irrigación con agua salobre | Toxicidad para cultivos |
Pérdida de materia orgánica | Prácticas insostenibles | Menor retención de agua |
Algunas medidas de adaptación que se han implementado en el país para revertir la degradación incluyen: agricultura sostenible e implementación de prácticas orgánicas (banano, café), agricultura sostenible con labranza de conservación y mejoramiento de terrenos erosionados con pendientes, y uso sostenible de la tierra y manejo sostenible de la tierra incluyendo irrigación.
7. Aumento de Plagas y Enfermedades
El cambio climático está creando condiciones más favorables para la proliferación de plagas y enfermedades agrícolas. Los cambios en temperatura y precipitación facilitarían la propagación de enfermedades transmitidas por vectores y por agua. El calentamiento de la temperatura y la humedad aumentará el tizón tardío, la plaga de papa más dañina, que puede expandirse por encima de los 3,000 metros donde está ausente actualmente.
La polilla del tubérculo de papa, que ahora se encuentra en áreas costeras y valles inter-andinos, también se expandirá debido al cambio climático. Estos cambios en los patrones de plagas y enfermedades requieren nuevas estrategias de manejo integrado de plagas y pueden resultar en mayores costos de producción para los agricultores.
Plaga/Enfermedad | Condición Favorable | Impacto Proyectado |
Tizón tardío | Temperatura y humedad alta | Expansión altitudinal |
Polilla del tubérculo | Temperaturas elevadas | Expansión geográfica |
Enfermedades transmitidas por vectores | Cambios en precipitación | Mayor incidencia |
Patógenos del suelo | Inundaciones frecuentes | Supervivencia prolongada |
El cambio climático puede aumentar la frecuencia de epidemias. Estos cambios en los patrones de enfermedades requieren sistemas de monitoreo más sofisticados y estrategias de prevención adaptadas a las nuevas condiciones climáticas.
Estrategias de Adaptación y Resiliencia
Para enfrentar estos desafíos, se requiere una mayor inversión en tecnologías y mecanismos de financiamiento para que los productores puedan modernizar sus fincas. El papel de las instituciones financieras es fundamental, necesitándose mecanismos de financiamiento adaptados al sector y esta nueva agricultura resiliente. Por ejemplo, tener seguros agrícolas flexibles, usar tecnologías avanzadas para evaluar riesgos y daños, y ofrecer subsidios para hacerlos más accesibles y atractivos para los agricultores.
Daniel Valerio recomienda que los agricultores transformen sus sistemas agroalimentarios hacia modelos más resilientes, eficientes e inclusivos capaces de producir alimentos de manera sostenible para satisfacer la demanda de la creciente población frente a un clima cambiante.
La gestión de riesgos climáticos en Yaque del Sur debe incluir la selección de variedades de cultivos que usen menos agua, la protección climática de carreteras de acceso, la construcción de embalses de agua para uso doméstico y agrícola, el establecimiento de sistemas agroforestales y pago por servicios ecosistémicos para promover la reforestación en la cuenca alta, el aumento de la eficiencia de irrigación, y el monitoreo mejorado y accesibilidad de datos climáticos.
Conclusión
El cambio climático presenta desafíos multifacéticos y complejos para la agricultura de República Dominicana. Las siete formas principales en que afecta al sector agrícola – sequías, inundaciones, huracanes, aumento de temperaturas, estrés hídrico, degradación del suelo y aumento de plagas – están interconectadas y se refuerzan mutuamente, creando un panorama de vulnerabilidad que requiere respuestas coordinadas e integrales.
Las pérdidas económicas documentadas, que alcanzan decenas de millones de dólares en eventos individuales, subrayan la urgencia de implementar medidas de adaptación efectivas. Los agricultores familiares, que constituyen el grupo más vulnerable, necesitan apoyo técnico y financiero específico para desarrollar capacidades de resiliencia.